EN 5 AÑOS EL GOBIERNO APLICARÁ SU HACHAZO AL TRASVASE TAJO-SEGURA

El caudal ecológico del río Tajo, del que después dependerá la disponibilidad de agua para el trasvase al Segura, irá aumentando en los próximos años de forma gradual.

La propuesta final del Ministerio para la Transición Ecológica sitúa en 7 metros cúbicos por segundo los que deberán correr a su paso por Aranjuez en enero de 2022, es decir, uno más del fijado en la actualidad.

Después se elevarán a 8 metros cúbicos por segundo en 2026 y a 8,6 en enero de 2027, unas cifras ampliamente rechazadas por los regantes del Levante.

Es uno de los cambios que contemplan los nuevos planes hidrológicos que ha presentado este lunes el Ministerio para la Transición Ecológica y que marcarán las pautas de gestión del agua entre 2022 y 2027.

En ellos no solo se han fijado los caudales ecológicos para el Tajo, sino también se ha introducido la previsión de una reducción de los recursos hídricos para todas las cuencas por el cambio climático de unos 1.700 hm3 al año o la inversión de unos 8.000 millones de euros por parte de la Administración General del Estado para depuración o la reutilización, entre otros.

Entre los puntos más polémicos se encuentra el caudal ecológico del Tajo, que se fija por primera vez tras una sentencia en este sentido del Tribunal Supremo. Los 7 m3/s suponen aumentar en un metro cúbico por segundo el flujo actual, aunque la propuesta inicial del Ministerio era de 8,52 m3/s, para la que ahora dan un plazo más amplio de tiempo, según informa el Ministerio.

Sin embargo, para los regantes del Levante español era inaceptable fijar el caudal ecológico por encima de los 7 m3/s por la merma que suponía en el trasvase y que ha sido la que ha motivado las protestas de los últimos meses.

Los cálculos que maneja la consejería apuntan a que con el caudal ecológico en 8,52 metros cúbicos por segundo supondría una reducción de unos 80 hm3, que podría incrementar hasta 130 si se tienen en cuenta los caudales generadores.