¿POR QUÉ EL PAN A PARTIR DE ESTE MES ES MÁS SOSO?

Los paladares más refinados quizás hayan notado que, desde el viernes pasado el pan es más soso. Eso es porque el 1 de abril de 2022 entró en vigor la nueva norma de calidad por la que es obligatorio un límite máximo de contenido de sal en el pan común, lo que contribuirá de forma decisiva a la menor ingesta de sal de la población. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de sal no debería superar los 5 gramos diarios al día, ahora la media de consumo diario está entre 9 y 12 gramos, y para evitarlo hay que tener en cuenta la sal oculta, aquella que aportan los alimentos elaborados.

En concreto, se establece un límite máximo de contenido en sal permitido en el pan común, de 1,31 gramos por 100 gramos de pan, lo que viene a ser 13,1 g de sal por kilo de pan.

Está norma de calidad del pan se aprobó en abril de 2019 (Real Decreto 308/2019) y entró en vigor el 1 de julio de 2019, pero la medida específica sobre los contenidos de sal se pospuso hasta el 1 de abril con la finalidad de que los fabricantes adaptaran sus procesos de producción para reducir este ingrediente.

El pan constituye una de las fuentes con más aporte de sal (19% del total del sodio ingerido), seguido del jamón, embutido y fiambres.

Los requisitos para llamar al pan integral

Asimismo, la normativa contempla requisitos más estrictos para considerar un pan integral, exigiéndose que el cien por cien de la harina empleada sea integral.

Para aquellos panes integrales o de otros cereales que no estén elaborados de forma exclusiva así, se tendrá que indicar el porcentaje de harina en el etiquetado final.

Otra novedad consiste en concretar la definición de masa madre, que se preserva a un tipo de elaboración que limita el uso de levaduras industriales y se establecen los requisitos para utilizar la denominación «elaborado con masa madre».

Y ustedes, ¿Han notado el cambio? ¡Nos encantará leerles en comentarios!