SACRAMENTO DE LA PRIMERA COMUNIÓN

PARTICIPAR EN COMÚN

La Primera Comunión es una ceremonia importante en la vida de todo niño. En ella, se recibe el Sacramento de la Eucaristía transformado en pan (hostia) y en vino; símbolos que remiten al cuerpo y la sangre de Cristo.

Como su palabra indica, comunión proviene del latín “comunión” y significa “participar en común”. Es un momento en el que se reúnen familiares, amigos y personas que comparten creencias religiosas afines, para celebrar esta unión entre el hombre y Dios.

El sacerdote es el único hombre capacitado para realizar la transformación de este rito que refleja el sacrificio del Hijo hecho carne que vino a la tierra para salvar a la humanidad. Para recibir la comunión es necesario estar bautizado previamente.

Los niños entre 7 y 8 años comienzan a prepararse a través de una formación en catequesis, la cual suele durar alrededor de un año y les enseña el significado de recibir este Sacramento y las normas de la Iglesia. Entre los 8 y los 10 años, los pequeños ya están listos para recibir a Jesús en su vida. Es un momento de alegría y fiesta.

Es importante que los padres sepamos que este primer encuentro con Dios, es de gran valor para los pequeños y que representa un momento muy profundo en sus vidas.